En este artículo te hablaré sobre la ciencia en evolución que hay detrás del Reconocimiento de Locutores por la Voz en la Acústica Forense.
En el mundo de la investigación forense, las técnicas y tecnologías utilizadas para resolver crímenes y casos judiciales se han desarrollado a pasos agigantados a lo largo de los años. Una de las áreas más fascinantes de este campo es el reconocimiento de locutores por la voz, una técnica que ha evolucionado desde sus primeros pasos en la década de los sesenta hasta convertirse en una herramienta valiosa para la resolución de casos desde la acústica forense.
El Nacimiento de la Técnica “Voiceprint”
La técnica del “voiceprint” es considerada como la precursora del reconocimiento de locutores por la voz. Fue desarrollada en los Estados Unidos en la década de los sesenta por Lawrence G. Kersta, quien empleó un instrumento llamado espectrógrafo para llevar a cabo sus investigaciones. Este instrumento generaba un gráfico de la señal de voz, teniendo en cuenta información frecuencial, temporal y energética, que se denominó espectrograma o sonograma.
Kersta partió de la idea de que la voz de cada persona es tan única como su huella dactilar, y creía que podía identificar a las personas a través de lo que él llamaba la “huella acústica” utilizando el análisis espectrográfico. Fue él quien acuñó el término “voiceprint identification”, que, debido a su similitud con la identificación de huellas dactilares, llevó a una analogía errónea.
La Unicidad de la Voz y la Individualidad
La idea detrás de esta técnica se basaba en la unicidad de la voz, que surge del mecanismo fisiológico y del proceso de aprendizaje del habla. Kersta sostenía que las cavidades vocales y los articuladores del tracto vocal son las partes que determinan la individualidad de una voz. Las dimensiones y la forma de acoplarse de las cavidades vocales, así como la forma dinámica en que los articuladores como los labios, dientes, lengua, paladar blando y músculos mandibulares se utilizan, hacen que sea extremadamente improbable que dos personas tengan el mismo patrón vocal.
Desafíos en la Identificación de Locutores
A pesar de las prometedoras bases científicas que Kersta y otros investigadores establecieron, la identificación de locutores por la voz no ha sido una tarea fácil. La información que individualiza a un hablante está profundamente entrelazada con otras características presentes en la señal de voz y a menudo está enmascarada por ellas. Factores como la variabilidad inherente a la señal de voz, factores intrínsecos (como la edad, el estado emocional y el estado físico) y factores extrínsecos (como dispositivos de adquisición y transmisión de la señal) pueden afectar la identificación.
Evaluación Científica y Jurídica
En 1979, a petición del FBI, un equipo de investigación liderado por el Dr. Richard H. Bolt realizó un estudio exhaustivo sobre la técnica del “voiceprint”. Este estudio, titulado “On the theory and practice of voice identification”, arrojó luz sobre varios desafíos en la ciencia y la práctica de la identificación de voz. Destacó la falta de claridad en las características que distinguen una voz de otra, la distribución de estas características en poblaciones grandes y la susceptibilidad de la voz al control voluntario.
En cuanto a la práctica, el estudio señaló la falta de fundamentos sólidos en los procedimientos de operación y en la precisión de las conclusiones. Esto llevó a confusiones y controversias en casos judiciales donde se aplicó el método del “voiceprint”.
Una Tecnología en Evolución
A lo largo de los años, el reconocimiento de locutores por la voz ha evolucionado significativamente. Se ha mejorado la tecnología, y las investigaciones continúan para superar los desafíos técnicos y científicos que aún persisten. Hoy en día, el reconocimiento de locutores por la voz se utiliza en una variedad de aplicaciones, desde la seguridad informática hasta la autenticación de usuarios en sistemas biométricos.
En resumen
En resumen, el reconocimiento de locutores por la voz ha recorrido un largo camino desde sus inicios en la década de los sesenta. A pesar de los desafíos que enfrentó en sus primeros días, ha avanzado significativamente y se ha convertido en una herramienta valiosa en la investigación forense y en muchas otras áreas. Con el tiempo, es probable que siga evolucionando y mejorando su precisión, lo que lo convertirá en una herramienta aún más esencial en el campo de la seguridad y la identificación.
